
Más que una mancha: Señales de cáncer de piel que no debe ignorar
El melanoma es el cáncer más maligno de todos. Causa metástasis más tempranamente.
Anualmente se diagnostican entre 2 y 3 millones de nuevos casos de cáncer de piel. El desarrollo de esta enfermedad depende de varios factores como biotipos cutáneos, genética y estilo de vida. Si se detecta a tiempo es tratable y la mayoría de las veces, curable. Examinarse los lunares una vez al mes es clave para detectar cualquier cambio o señal de alerta. En caso, de identificar alguna lesión sospechosa se debe ir al médico de inmediato.
El dermatólogo Carlos Sordo, de la Clínica Ricardo Palma, explica que aunque en sus inicios no presenta síntomas, esta neoplasia puede enmascararse o confundirse con otras alteraciones de la piel. Dependiendo de sus variantes y características (mayor o menor malignidad) se puede sospechar de su existencia. Es decir, si aparecen lesiones en el cuerpo de un momento a otro y éstas cambian de color, forma, tamaño o duelen, sangran y no cicatrizan.
El carcinoma basocelular, el carcinoma espinocelular y el melanoma son los tipos de cáncer de piel más comunes. El primero, crece lentamente y no produce metástasis internas. Por lo general, se trata de una lesión redondeada, con vasos capilares de color perlado o pigmentada. Suele aparecer en zonas expuestas a la intemperie y está relacionado con antecedentes de quemaduras solares intensas. Es menos agresivo, pero puede ser muy destructivo, si se localiza en los párpados y en el canto interno de los ojos.
El carcinoma espinocelular se desarrolla con mayor rapidez, en comparación al anterior, y se ubica en áreas dañadas de manera crónica por el sol: rostro (labios) y extremidades (brazos). Afecta con frecuencia a personas que trabajan o realizan actividades al aire libre. Al inicio, la piel luce enrojecida y después con placas escamosas o sangrantes que crecen y/o reaparecen. Si no se trata en forma oportuna, puede generar metástasis.
El melanoma es el cáncer más maligno de todos. Causa metástasis más tempranamente. Si está ubicado solo en la epidermis («in situ») y no ha invadido planos profundos, tiene mejor pronóstico. Aparece en zonas de piel cubiertas; sin embargo, desde hace un tiempo el número de lesiones en zonas expuestas (con antecedentes de quemaduras solares intensas) ha aumentado. Puede aparecer en piel que parece sana o crecer a partir de un lunar o lesiones pigmentadas de la piel.
Medidas de prevención
Esta patología es una de las neoplasias más comunes en el mundo, pero también una de las más prevenibles. La exposición solar entre 10 de la mañana y las 4 de la tarde sin protección es el principal factor de riesgo. Aquí algunas recomendaciones para prevenir esta dolencia cada vez más frecuente entre adultos jóvenes.
Utilice bloqueador solar los 365 días del año. Si va a salir entre las 10 am y las 4 de la tarde busque la sombra, en especial, en verano. Use ropa de manga larga, de colores intermedios y de tela no muy delgada para que bloquee los rayos ultravioleta. Póngase un sombrero de ala ancha y lentes protectores.
Las personas más susceptibles a desarrollar este mal – ya sea por tener la tez muy clara o por trabajar a la intemperie- deben acudir al dermatólogo al menos una vez al año para un chequeo minucioso de la piel.
Recuerde, más del 90% de los casos de cáncer de piel se pueden prevenir con hábitos simples y constantes. Revisarse, protegerse y actuar a tiempo puede marcar la diferencia entre una lesión tratable y una enfermedad mortal.