Bogotá fue el epicentro de la innovación y empoderamiento femenino

¿Hipertensión ocular? 5 señales de alerta que no debes ignorar
La presión ocular alta puede no presentar síntomas durante años, pero es un importante factor de riesgo para el glaucoma, una de las principales causas de ceguera irreversible en el Perú.
La hipertensión ocular (ó presión intraocular elevada), puede ser un precursor silencioso del glaucoma, una enfermedad que afecta aproximadamente al 3% de la población peruana y es responsable del 13,7% de los casos de ceguera en el país según el Ministerio de Salud.
Aunque en sus etapas iniciales suele ser asintomática, existen señales que pueden indicar un aumento de la presión ocular. A continuación Marleni Mendoza, médico oftalmóloga y asesora científica de Laboratorios Lansier, señala cinco síntomas que no deben pasarse por alto:
- Visión borrosa ocasional: Episodios intermitentes de visión borrosa, especialmente después de actividades que requieren esfuerzo visual, como leer o utilizar dispositivos electrónicos, pueden ser indicativos de presión ocular elevada.
- Dolor ocular: Aunque no es común, algunas personas pueden experimentar molestias o dolor en los ojos cuando la presión intraocular es significativamente alta.
- Aparición de halos alrededor de las luces: La percepción de halos o destellos alrededor de las luces, especialmente por la noche, puede ser una señal de alerta.
- Pérdida de visión periférica: La disminución de la visión lateral o periférica es un síntoma potencial de hipertensión ocular avanzada, aunque suele ser imperceptible en las etapas iniciales.
- Dolores de cabeza persistentes: Dolores de cabeza frecuentes, especialmente si se acompañan de otros síntomas visuales, pueden estar relacionados con un aumento de la presión ocular.
‘’Es importante destacar que la hipertensión ocular no es sinónimo de glaucoma. En la hipertensión ocular, el nervio óptico aún no presenta daños ni hay pérdida de visión, pero existe un riesgo incrementado de desarrollar glaucoma. Por ello, las personas con presión ocular elevada deben someterse a revisiones oftalmológicas regulares para monitorear su condición’’, advierte la especialista.
El diagnóstico temprano y el tratamiento oportuno pueden prevenir la progresión hacia el glaucoma. “Las opciones terapéuticas, incluyen a los medicamentos oculares antihipertensivos, sobre todo aquellos libres de preservantes, la terapia con láser y en algunos casos, es necesaria la cirugía”, sostuvo la especialista.
Asimismo, Marleni Mendoza señala que la hipertensión ocular puede desarrollarse sin síntomas evidentes, por lo que es fundamental realizar exámenes oculares periódicos, especialmente a partir de los 40 años, para detectar cualquier anomalía en la presión intraocular y preservar la salud visual.