No es solo un resfrío: el invierno golpea fuerte a la salud de los adultos mayores
Con más de 16 mil casos de neumonía en lo que va del año, especialistas alertan sobre la urgencia de vacunar y cuidar a la población más vulnerable frente a las bajas temperaturas.
El invierno ya se siente con fuerza en Perú, y con él llegan cifras alarmantes: más de 16.000 casos de neumonía en mayores de 60 años y más de medio millón de infecciones respiratorias agudas (IRA) en la población general, según reportes del Ministerio de Salud. Las temperaturas inusualmente bajas alertadas por el SENAMHI agravan el panorama, especialmente para los adultos mayores, quienes enfrentan mayores riesgos de complicaciones graves.
Frente a esta realidad, la doctora Julissa Mogollón, geriatra de Sanitas Consultorios Médicos, hace un llamado a reforzar la prevención mediante vacunación, alimentación adecuada y controles médicos periódicos. “Las vacunas contra influenza, neumococo y la dTpa están disponibles gratuitamente en centros públicos. Son fundamentales para evitar hospitalizaciones y cuadros severos”, señala.
Claves para proteger a los adultos mayores este invierno
La especialista brinda seis recomendaciones esenciales para cuidar la salud respiratoria durante la temporada:
- Monitorear oxigenación y presión arterial
Controlar la saturación de oxígeno es crucial en personas con afecciones como EPOC, asma o problemas cardíacos. Una presión arterial estable también contribuye al bienestar respiratorio. - Alimentación e hidratación adecuadas
Una dieta balanceada con frutas, verduras y proteínas refuerza el sistema inmune. Beber entre 6 y 8 vasos de agua diarios, además de infusiones y caldos, favorece la hidratación y la función pulmonar. - Vestimenta adecuada para conservar el calor
Usar ropa en capas, medias gruesas, gorros y bufandas ayuda a evitar resfríos y dolencias articulares. Incluso dentro del hogar, mantener el abrigo es vital. - Higiene del hogar y ventilación diaria
Limpiar superficies, ventilar habitaciones y lavar regularmente ropa de cama disminuye la propagación de virus. El lavado frecuente de manos sigue siendo una herramienta clave. - Actividad física regular
Caminar, practicar taichí o realizar ejercicios suaves durante al menos 30 minutos al día mejora la circulación y el ánimo general. - Controles médicos frecuentes
Revisiones con especialistas, como neumólogos o cardiólogos, permiten detectar signos de alerta y ajustar tratamientos en función del clima.
Finalmente, la doctora Mogollón subraya la importancia del acompañamiento emocional. “La atención médica es fundamental, pero también lo es el afecto familiar. El aislamiento puede ser tan perjudicial como cualquier virus en invierno”, concluye.
